La escasez de níquel y cobre compromete el futuro de las baterías actuales
diciembre 11, 2020|Publicado por: Baterias
Los automóviles eléctricos han supuesto un giro en el parque automovilístico mundial, estos nuevos vehículos que pretenden dejar atrás los vehículos que funcionan a base de productos derivados del petróleo están cada día más presentes y suponen un intento por dejar atrás la contaminación producida por el tránsito de los vehículos. Pero, sin embargo, ¿habrá escasez de baterías en el futuro? ¿Es posible dotar al mundo entero de este tipo de vehículos sin acabar con las reservas de níquel y cobre? Desde Canaribat queremos abordar este problema.
Y es que hace poco la gerente global de suministros de metales de baterías para Tesla, Sarah Maryssael, ha explicado que existe una preocupante escasez de minerales para la fabricación de las baterías de vehículos eléctricos, lo que, unido a la poca tendencia de la marca a hablar sobre la industria de los metales, indica que la preocupación es mayúscula.
La escasez de el níquel y el cobre para la fabricación de baterías supone un aspecto muy importante en la evolución de los vehículos eléctricos, y es que los desafíos a largo plazo de la industria de los metales son importantes. La industria del cobre ha sufrido falta de inversión durante años y ahora está luchando por expandirse debido a la creciente necesidad de suministros derivados de la electrificación que envuelve todos los procesos tecnológicos.
Pero no solo afecta a las baterías de los vehículos, en donde el níquel y su suministro tiene un papel fundamental, sino otros metales que se utilizan en diferentes partes de los coches y cuyo suministro debe mantenerse a largo plazo para aportar la eficiencia buscada en el sector.